El crestado chino es una de las razas de perro sin pelo más conocidas y, pese a su nombre, lo cierto es que no está claro que su origen se sitúe en China, sino que más bien hay evidencias de que puede proceder de África o América. Lo que no se puede negar, es la popularidad que alcanzó en China cuando, además de animales de compañía, eran guardianes de tesoros o perros de caza de familias de la Dinastía Han. ¿Quieres descubrir un poco más sobre esta fantástica raza?
Características del perro crestado chino sin pelo
Tamaño: pequeño
Rango de peso: entre 2,3 y 5,5kg
Altura: machos 28 – 33m / hembras 23 – 30cm
El crestado chino es la raza más popular de los perros sin pelo. Son canes que siempre están alerta, por lo que no es de extrañar que en China fueran populares como perros guardianes.
Por lo general se relacionan bien con otros animales y no tienen problema en convivir y relacionarse con niños, con quienes son muy cariñosos y juguetones, aunque debemos tener cuidado y enseñar a los niños a tratarles amablemente ya que debido a la fragilidad de su piel sin pelaje pueden hacerse heridas con facilidad.
Su inteligencia hace que aprendan órdenes con rapidez, por lo que son fáciles de adiestrar. Son perros muy leales, sociables, que disfrutan de la compañía de sus dueños y sienten la necesidad de liderazgo por su parte. Por ello necesitan estar mucho tiempo acompañados, ya que en caso contrario pueden llegar a desarrollar comportamientos autodestructivos o sufrir ansiedad por separación.
Si tienes un crestado chino desde cachorro, conviene que le socialices con otros animales y con el entorno, exponiéndole a ruidos y juegos que eviten que pueda volverse muy tímido o asustadizo. Tanto si es cachorro como si es adulto, es una raza muy activa que necesita una buena cantidad de ejercicio físico diario.
Salud y cuidados básicos
No es de extrañar que debido a su ausencia de pelaje haya que prestar especial atención al cuidado de su piel. Un perro crestado chino sin pelo está más expuesto a los rayos del sol y a los cambios de temperatura que cualquier otro perro con pelo. Por ello, es fundamental protegerle con abrigos cuando descienden las temperaturas y usar crema solar cuando hace calor o van a pasar tiempo bajo el sol. Puedes consultar con el veterinario cuál es la protección solar más apropiada para tu mascota sobre todo teniendo en cuenta si su piel es blanca o rosada (más propensa a quemaduras). No obstante, tampoco hay que evitar que pase tiempo bajo el sol, ya que es una de las principales fuentes de vitamina D para la piel.
Además de la temperatura, la fragilidad de su piel es otro factor a tener en cuenta, ya que pueden hacerse heridas con facilidad al caminar o jugar en terrenos con ramas, maleza o vegetación alta en general.
Como con todo animal de compañía, hay que tener en cuenta el calendario de vacunaciones y desparasitaciones, una alimentación adecuada y visitas al veterinario de forma periódica. Cabe destacar la consulta al veterinario sobre la salud de sus dientes y uñas, ya que es una raza que puede sufrir pequeñas deformaciones en ambas partes.
La esperanza de vida del crestado chino oscila entre los 13 y los 15 años y, aunque generalmente es un perro que goza de buena salud, hay algunas posibles enfermedades hereditarias que deberíamos tener en cuenta como luxación patelar, pérdida temprana de dientes, lesiones en la piel o enfermedad de Calvé-Perthes-Legg (provocada por una isquemia del fémur).