Esterilizar y castrar gatos ¿Sí o no?

Desde Cremascota queremos hacer un pequeño análisis sobre las ventajas y desventajas de la esterilización y/o castración en los gatos. Sin duda, un tema polémico sobre el que no existe una respuesta correcta.

En primer lugar, creemos que es importante distinguir que no es lo mismo si estamos hablando de gatos callejeros o de gatos domésticos. Sus hábitos y estilo de vida no son los mismos y tampoco lo son sus cuidados alimentación ni atención sanitaria.

A pesar de estas diferencias os comentamos algunas de las motivaciones para castrar o esterilizar a un gato.

3 Ventajas de la esterilización en gatos

Reduce la posibilidad de cáncer en las hembras (mama y útero) 

Según estudios veterinarios, cuando esterilizamos a un gato hembra, especialmente si lo hacemos antes de su primer celo, las posibilidades que sufra un cáncer de mama o incluso de útero se reducen en aproximadamente un 85%.

Es importante que al tomar esta decisión tengamos en cuenta si la hembra no va a tener camadas a lo largo de su vida.

Por otro lado, también es importante el tipo de tratamiento o método para la esterilización que puede ser mediante cirugía o tratamiento por medicamentos.

Favorecen el control en la población

Especialmente en los casos de colonias de gatos callejeros, la esterilización puede ser la medida perfecta para que haya control de la población gatuna. De hecho existen algunas iniciativas llevadas a cabo por Protectoras de Animales e incluso por las instituciones públicas, como es el caso del Ayuntamiento de Madrid donde recientemente se ha creado una red de “colaboradores” de colonias de gatos donde se lleva a cabo la esterilización de las hembras entre otras medidas.

Reduces e incluso eliminas los síntomas de celo (hembras y machos) Marcado.

Aquí entran en juego por un lado las incomodidades que pueden surgir al tener un gato con celo en casa, pero también, y sobre todo, la calidad de vida del animal.

Los gatos, tanto machos como hembras, son conocidos por sus intensos periodos de celo:

– Marcaje con orina y heces

– Fuertes y constantes maullidos

– Comportamiento nervioso e incluso agresivo

Sin duda es un periodo de estrés para nuestro gato que tiene altas probabilidades de desaparecer tras la esterilización (o castración en el caso de los machos), especialmente cuando se hace a edades más tempranas..

No nos olvidemos: Cualquier decisión en torno a la esterilización o castración de un gato, debe tomarse con la intención de mejorar de la calidad de vida del gato y no sólo de las personas.

Y tú ¿Estás de acuerdo con la esterilización?