Golpe de calor en gatos, ¿Sabes qué hacer?

Golpe de calor en gatos, ¿Sabes qué hacer?
14 agosto, 2019 Sara

Al igual que puede ocurrir con humanos o perros, los gatos también están expuestos a sufrir un golpe de calor (hipertemia) en verano debido a las altas temperaturas. Una subida en exceso de la temperatura corporal de un gato puede llegar a causarle daños irreversibles en su organismo o en el peor de los casos incluso provocarle la muerte. Por ello es necesario saber cómo prevenirlo y reconocer los síntomas para una rápida actuación.

¿Cuándo se produce un golpe de calor en gatos?

Como ya sabrás, los gatos tienen un sistema de termorregulación diferente al de las personas, es decir, no sudan como nosotros. Esto les hace más sensibles a los cambios fuertes de temperatura y, cuando hace mucho calor, un gato puede acabar con sus reservas de sales minerales y azúcar, provocando así un colapso interno que se manifiesta a través del golpe de calor.

Aunque algunos felinos son más propensos a sufrir golpes de calor por factores como edad avanzada u obesidad, las causas más frecuentes de la hipertemia son:

  • Altas temperaturas, humedad o ambientes sofocantes que puedan deshidratar a nuestro felino.
  • No beber agua con la frecuencia adecuada.
  • Estar expuesto excesivamente al sol sin posibilidad de refugiarse.
  • Pasar demasiado tiempo en espacios cerrados o sin ventilación como transportines o coches.

¿Cuáles son los síntomas que puede tener mi gato?

Si tu gato está sufriendo un golpe de calor, mostrará varios de los siguientes síntomas:

  • Temperatura corporal superior a 42ºC.
  • Dificultad para respirar o respiración muy acelerada.
  • Aumento del ritmo cardiaco.
  • Cambio de color en la lengua y las encías, volviéndose de un tono azulado.
  • Temblores musculares, tambaleos y debilidad corporal.
  • Vómitos.

¿Cómo actuar si mi gato está sufriendo un golpe de calor?

Ante cualquier sospecha de golpe de calor, lo ideal es llevar a nuestro minino al veterinario, pero si no te da tiempo debes actuar con rapidez y aliviar a tu mascota para tratar de estabilizarla. Para ello puedes:

  • Llevar a tu gato a un lugar más fresco, donde no reciba rayos del sol, para tratar de evitar que su temperatura corporal siga subiendo.
  • Aplicar frío con gasas o toallas en su cabeza, cuello, ingles y axilas para refrescar así la sangre que va al cerebro e intentar así calmar su respiración y reducir las lesiones.
  • Humedecer su boca con agua pero sin obligarle a beber.

No cubras a tu gato con toallas o trapos ni tampoco le bañes con agua muy fría para tratar de acelerar el proceso. Consulta siempre con el veterinario para asegurar el bienestar de tu mascota y descartar posibles efectos secundarios.

¿Se puede prevenir la hipertemia en gatos?

Nunca podemos llegar a prevenir al 100% un golpe de calor en nuestros animales ni en nosotros mismos, pero sí que conviene extremar las precauciones en días de calor excesivo o si sabemos que estaremos expuestos a altas temperaturas durante un tiempo prolongado.

Como “más vale prevenir que curar”, aquí van algunos consejos a tener en cuenta:

  • Comprueba que tu gato tiene siempre agua fresca y limpia.
  • Nunca dejes a tu mascota encerrada en espacios pequeños, mal ventilados o expuestos al sol.
  • Intenta evitar darle de comer en las horas de más calor.
  • Si tu gato tiene el pelo muy largo, valora un corte de pelo.
  • Asegúrate de que tu gato tiene siempre algún sitio con sombra donde resguardarse.